Agencias/Ciudad de México.- La demócrata Kamala Harris hizo este miércoles historia al jurar como vicepresidenta de Estados Unidos, convirtiéndose en la primera mujer, la primera afroamericana y la primera persona de origen asiático en llegar a este puesto en el país.
«Juro solemnemente que apoyaré y defenderé la Constitución de Estados Unidos contra todos los enemigos, extranjeros y domésticos; que mantendré una fe real en esto mismo», comenzó Harris, que juró con la ayuda de la jueza Sonia Sotomayor, la primera magistrada latina del Tribunal Supremo federal.
El juramento es una fórmula fija que pronuncian todos los vicepresidentes cuando juran el cargo.
Al igual que sus predecesores, Harris terminó su juramento con el compromiso de que cumplirá ‘bien y fielmente los deberes del puesto’, en la ceremonia que se celebra en la escalinata oeste del Capitolio del país en medio de estrictas medidas de seguridad.
La que hasta ahora había sido senadora por California y que el lunes renunció a ese cargo juró el puesto de vicepresidenta poco antes de que Joe Biden haga lo mismo como presidente, frente al jefe del Tribunal Supremo, el juez conservador John Roberts.
Harris juró con la mano encima de dos Biblias, como es tradición: una de ellas perteneció a una amiga de su familia, Regina Shelton, y la segunda fue propiedad del fallecido juez Thurgood Marshall, que fue el primer afroamericano que formó parte del Tribunal Supremo y es uno de los grandes referentes de la vicepresidenta electa.
«Aunque sea la primera mujer en el cargo, no seré la última», dijo Harris en un discurso el 7 de noviembre, el primero después de que las cadenas estadunidenses proyectaran a Biden y Harris como los ganadores sobre Trump y el vicepresidente Mike Pence.
Si bien Harris respondió ferozmente durante la campaña, en los últimos dos meses giró hacia los planes que ella y Biden han ido revelando para ayudar a las familias en dificultades y arreglar una economía tambaleante.
Los primeros 100 días de la administración Biden-Harris se centrarán en conseguir el control de esta pandemia, asegurando que las vacunas se distribuyan de forma equitativa y gratuita para todos», escribió el martes.
Mientras que el trabajo del vicepresidente es a menudo visto como ceremonial, Harris también tendrá un poderoso papel decisivo en el Senado de Estados Unidos.
Gracias a las dos sorprendentes victorias demócratas en la segunda vuelta este mes en el estado Georgia, el Senado estará dividido en partes iguales: 50 demócratas y 50 republicanos.
Eso significa que Harris puede pasar un tiempo considerable en el Capitolio actuando como el voto decisivo sobre distintos temas importantes, desde los nominados judiciales hasta el plan de estímulo de 1.9 billones de dólares de Biden.
Los dos padres de Harris son inmigrantes.
Su padre llegó a Estados Unidos desde Jamaica y su madre, ya fallecida, desde India y sus vidas quedaron marcadas por la narrativa del «sueño americano».
Harris nació el 20 de octubre de 1964 en Oakland, California, que entonces era un foco de activismo por los derechos civiles y en contra de la guerra.
Se graduó en la Universidad de Howard, en Washington, un ícono de la cultura negra en Estados Unidos, y ese fue el comienzo de una carrera fulgurante como fiscal, que la llevó a ser elegida dos veces como fiscal de distrito en San Francisco y luego fiscal general de California en 2010.
Pero su discurso de que fue una «fiscal progresista» ha sido cuestionado por críticos que señalan que peleó por mantener condenas injustas y se opuso a reformas en California, como una ley que instaba al fiscal general a investigar los tiroteos en los que estuviera involucrada la policía.
Pero su trabajo fue clave para reunir una base y tener resonancia para lanzar una candidatura exitosa para llegar al Senado en la campaña de 2016, convirtiéndose en la segunda mujer negra en ser elegida para la Cámara Alta.
Su gestión como fiscal general le permitió acercarse a Beau Biden, el hijo fallecido del exvicepresidente, que tenía el mismo cargo que ella en Delaware, y quien murió de cáncer en 2015.