Agencias, Ciudad de México.- Un calor asfixiante afectó el martes a decenas de millones de personas en Estados Unidos, obligando a las personas, e incluso a los animales del zoológico, a hallar formas de refrescarse mientras se aproxima el verano, en lo que promete ser una semana sofocante.

Las alertas por calor extremo se extendieron el martes desde Iowa hasta Ohio, e incluso hasta la parte norte de Michigan, provocando la cancelación de las actividades al aire libre en toda la región. El Servicio Meteorológico Nacional pronosticó que la peligrosa ola de calor se abrirá paso a través del país hacia Maine al menos hasta el viernes.

Cerca de Toledo, Ohio, la ciudad de Rossford canceló su feria callejera semanal pues se espera que las temperaturas alcancen más de 32,2°C (90 °F). Un banco de alimentos del norte de Nueva York canceló las entregas del miércoles por preocupaciones relacionadas con su personal y voluntarios.

Una organización que suministra productos a áreas con un acceso limitado a alimentos frescos en Columbus, Ohio, preparó toallas congeladas para sus trabajadores por si sufren demasiado calor y empacó agua fría para que permanezcan hidratados.

“La hidratación es la clave”, dijo Monique McCoy, gerente de mercadotecnia de Local Matters Veggie Van.

Varias escuelas en Nueva York cancelaron el martes sus visitas al zoológico Rosamond Gifford en Syracuse, donde los trabajadores activaron los rociadores de agua para los visitantes y los animales. Incluso colocaron trozos de hielo en las piscinas de los elefantes y otros animales, dijo Ted Fox, director ejecutivo del zoológico.

“A la mayoría de las especies les encantan”, dijo Fox. “Incluso a los tigres les encanta lamer el hielo y poner la cabeza en él cuando hace tanto calor”.

En un estudio reciente se encontró que el cambio climático hace que las olas de calor avancen más lentamente y afecten a más personas durante más tiempo. El año pasado, en Estados Unidos se produjo la mayor cantidad de olas de calor, que son temperaturas anormalmente altas con más de dos días de duración, desde 1936.

Chicago batió el récord de temperatura de 1957 con una máxima de 36,1 grados Celsius (97 grados Fahrenheit). El calor continuaría esta semana y la sensación térmica rondaría en ocasiones los 37,7 ºC (100 ºF), según una publicación en la red social X de la oficina en Chicago del Servicio Meteorológico Nacional (NWS, por sus siglas en inglés).

Buena parte del centro-norte y el nordeste estaban bajo alertas o avisos por calor, y las autoridades anunciaron la apertura de centros de refresco e instaron a la gente a limitar las actividades al aire libre cuando fuera posible y comprobar cómo estaban familiares y vecinos que pudieran ser vulnerables al calor.

La gobernadora de Nueva York Kathy Hochul anunció el martes que había activado a la Guardia Nacional para asistir en cualquier emergencia por calor que surja en los próximos días.

“Este es un momento de riesgo significativo y estamos haciendo todo lo que podemos para asegurar que todas las vidas están siendo protegidas”, dijo la gobernadora en conferencia de prensa.

En el sur de California, los bomberos incrementaron el lunes el perímetro contenido de un gran incendio en las montañas al norte de Los Ángeles. Pero el clima caluroso, seco y con fuertes vientos del martes podría suponer un reto para sus esfuerzos. Varios incendios forestales ardían también en Nuevo México, provocando la evacuación de un poblado de 7.000 habitantes.

Mientras buena parte de Estados Unidos se abrasaba, el lunes y el martes había previsiones de nevadas tardías en el norte de las Montañas Rocosas. Partes de Montana y el norte-centro de Idaho estaban bajo una alerta de tormenta invernal. Se esperaban hasta 51 centímetros (21 pulgadas) de nieve en zonas elevadas en torno al Parque Nacional de los Glaciares.

Entre tanto, una nueva ronda de humedad tropical llevaba una creciente amenaza de aguaceros e inundaciones repentinas en la costa central del Golfo de México. Se espera que la temporada de huracanes de este año sea una de las más activas en la memoria reciente.