Agencias/ Ciudad de México.- En Calabria, la región más pobre de Italia, inició este miércoles el mayor juicio contra la mafia en los últimos 30 años, informa La Repubblica.
Los imputados son 325, entre los que se encuentran políticos y funcionarios, acusados de pertenecer a la mafia calabresa, la ‘Ndrangheta, que a pesar de ser menos conocida que la Cosa Nostra siciliana y la Camorra napolitana es la más poderosa de las organizaciones mafiosas italianas.
La variada lista de sus delitos incluye homicidios, tráfico de drogas, extorsión, lavado de dinero y abuso de poder.
Casi todos los acusados fueron detenidos en diciembre de 2019 después de una larga investigación que comenzó en 2016 y se extendió a 11 regiones italianas. Solo en la ciudad calabresa de Vibo Valentia, sede del clan Mancuso, 2,500 policías participaron en redadas. Varios de los mafiosos detenidos se escondían en búnkeres secretos construidos por ellos mismos.
La ‘Ndrangheta es además la más rica de las mafias italianas. Un estudio realizado por Demoskopica Research Institute en 2013 calculó que la organización, que anualmente factura 53,000 millones de euros, es más rica que Deutsche Bank y McDonald’s juntos. Esta enorme fortuna proviene principalmente del tráfico de cocaína entre Europa y América Latina.
Pese a que para la celebración del juicio se habilitó en la ciudad calabresa de Lamezia Terme una enorme sala con capacidad para 1,000 personas dotada de jaulas para los acusados, muchos de ellos asistirán a las audiencias desde sus cárceles debido a las restricciones relacionadas con el coronavirus.
El juicio ya es considerado histórico, al constituir el segundo en importancia después del que en los años 1980 se celebró contra 475 mafiosos de la Cosa Nostra siciliana, y que estuvo encabezado por dos famosos jueces antimafia, Giovanni Falcone y Paolo Borsellino, ambos asesinados en 1992.
La operación contra la ‘Ndrangheta de 2019 fue dirigida por el fiscal de Catanzaro, Nicola Gratteri.
Una imponente estructura de más de 3.000 metros cuadrados ha sido construida para la ocasión en la ciudad industrial de Lamezia Terme, dentro de la cual se sentarán en el banquillo de los acusados los líderes en Italia y Europa del jugoso tráfico de cocaína, contó Gratteri.
El fiscal creció en Calabria, la región pobre del sur de la península y cuna de la organización que logró ramificarse en todo el mundo, superando a la Cosa Nostra siciliana, para convertirse en una de las estructuras criminales más poderosas del viejo continente.
«Conozco bien a la ‘Ndrangheta, desde adentro, porque cuando era niño, iba a la escuela con los hijos de los jefes de la mafia», recalca Gratteri.
«Los niños con los que jugaba entonces se convirtieron a su vez en mafiosos y luego en narcotraficantes. Por ello conozco la filosofía criminal, la forma de pensar de los miembros de la ‘Ndrangheta, y eso me ayuda en mi trabajo», reconoció.
- Quebrar la omertá –
Gratteri, que está «muy seguro» del éxito de su investigación, advirtió de que será un proceso largo y complejo, con más de 900 testigos citados sólo por la fiscalía.
Serán desveladas las conexiones con la política, la masonería, los empresarios, a través de abogados, funcionarios y agentes corruptos y se centrará en la familia Mancuso, el sanguinario clan de la provincia de Vibo Valentia.
Gratteri, de 62 años, se inspira en los dos legendarios magistrados antimafia, Giovanni Falcone y Paolo Borsellino, asesinados por la mafia y famosos por haber presidido el primer megajuicio contra la mafia siciliana en la década de 1980.
Gracias a ese juicio cientos de personas fueron condenadas y se asestó uno de los golpes más duros a la Cosa Nostra, pese a que costó la vida a los dos magistrados, asesinados por orden de la mafia en 1992.
Para su desafío, Gratteri cuenta con el colapso gradual de la «omertá», la ley del silencio que impone la mafia.
«En los últimos años, hemos ganado mucha credibilidad, mucha confianza. La gente ha comenzado a cooperar, nos está apoyando, está empezando a creer en nosotros», explicó el fiscal que ha sacrificado su vida personal por la lucha contra la mafia.
Autor de numerosos libros sobre el tema, entre ellos «Hermanos de sangre» (2006) y «La red de los invisibles» (2019), ha viajado numerosas veces a América Latina, sobre todo para escribir «Oro blanco» (2015) sobre el tráfico de cocaína.