Agencias/ Ciudad de México.- Después de ser de las pocas compañías del mundo que lograron salir airosas de la pandemia a lo largo de 2020, a Netflix le toca afrontar un año presionado por los objetivos de mantenerse líder del mercado.
Al cierre del pasado mes de diciembre, la empresa había crecido hasta sumar 208 millones de suscriptores gracias, sobre todo, a la necesidad de entretenimiento hogareño que provocaron las medidas de cuarentena y aislamiento. Sin embargo, el primer trimestre de 2021 desveló una bajada importante en los pronósticos depositados para el comienzo del nuevo año que habría llevado a la empresa a verse forzada a invertir más que nunca.
Entre la competencia voraz que azota al mercado streaming y la bajada de nuevas suscripciones en el comienzo de 2021, Netflix anunció a sus accionistas que invertirá nada menos que 17 mil millones de dólares en contenido para este año. Una cifra descomunal, muy superior a la invertida en años anteriores.
En la carta emitida a sus accionistas, Netflix comunicó haber sumado 3.98 millones de nuevos suscriptores en el primer trimestre de 2021. Una cifra menor a los 6 millones que pronosticaban conseguir (según Indiewire) y muy por debajo de los 15 millones que consiguieron en el primer trimestre de 2020, cuando la pandemia de Covid-19 comenzaba a expandirse por el mundo. Por ejemplo, en diferentes países de Europa, las medidas sanitarias e imposición de cuarentenas comenzaron a partir de marzo. A lo largo de 2020 el crecimiento continuó mientras estrenaban los proyectos previstos y terminados antes de la llegada del Covid-19 a nuestras vidas.
Sin embargo, esa pandemia que benefició la llegada de nuevos suscriptores ahora se torna en su contra al haber llegado a un momento clave en donde los objetivos planificados se hacen difíciles de conseguir. Entre el regreso a la normalidad cada vez más cerca a raíz de los planes de vacunación (o la esperanza de ella), el crecimiento de Disney+, el poderío mantenido de HBO, la llegada de nuevas plataformas y la ausencia de rodajes durante gran parte de 2020, Netflix opta por invertir una fortuna.
Es cierto que los ejecutivos de la compañía fueron realistas y comunicaron varias veces a sus inversionistas que esperaban una caída en las visualizaciones y suscripciones a medida que las normas de distanciamiento social se relajaran.
Pero también es cierto que esperaban alcanzar los 6 millones de cuentas nuevas en el primer trimestre de 2021, y se quedaron a más de 2 millones por debajo. Una noticia que afectó a su valoración en la bolsa bajando un 11% en las últimas horas del martes.
Según Netflix, la culpa de la bajada se debe al contenido light que ofrecieron a lo largo de los primeros meses del nuevo año (en gran parte por la falta de rodajes en 2020), y no a la competencia ni a la subida de precios que impusieron en octubre. Aunque es probable que la competencia lo vea diferente. El éxito reciente de Disney+ podría ser la prueba de ello gracias al terremoto viral de la segunda temporada de The Mandalorian y el estreno de WandaVision.
Netflix confía en que el crecimiento será más fuerte en la segunda mitad de 2021 gracias a los estrenos rodados en los últimos meses (cuando comenzaron a imponerse medidas de seguridad que permitieron que la industria reanudara sus labores), y a las inversiones previstas.
Una inversión que ascenderá a “los 17 mil millones en efectivo para contenido este año” y que, según la empresa, servirá para “continuar llevando una variedad maravillosa de títulos […] con más [contenido] original este año que en el último” (vía Variety). No obstante, aquí merece la pena destacar la diferencia abismal de capital que Netflix invertirá para mantenerse líder: en 2020 gastaron $11.8 mil millones, y en 2019 unos $13.9 mil millones. Es decir, para demostrar a sus inversionistas que pueden seguir arriba apostarán una verdadera fortuna en comprar y producir contenido. Sin embargo, me pregunto hasta qué punto asciende el riesgo de semejante inversión. Si el mundo recupera cierta normalidad y no necesita tanto del streaming en sus vidas como en 2020, y si Disney+ y Marvel continúan marcando un crecimiento constante a base de pocos estrenos pero efectivos, ¿podría terminar siendo contraproducente para Netflix?
Las esperanzas estarían depositadas en el retorno de Sex Education, The Witcher, You y La casa de papel, así como el final de la trilogía Mi primer beso, el estreno de Red Notice (con Dwayne Johnson, Gal Gadot y Ryan Reynolds) y Don’t look up (con Jennifer Lawrence, Leonardo DiCaprio, Meryl Streep, Cate Blanchett y Timothée Chalamet). Además de otros proyectos internacionales. Y es que, según los datos revelados, el 83% del crecimiento conseguido en 2020 pertenece a usuarios extranjeros. Es decir, fuera de Norte América.
Según Netflix, las series más vistas del primer trimestre de 2021 fueron Lupin (76 millones de usuarios la habrían visto en sus primeros 28 días), Destino: la saga Winx (57 millones), Ginny y Georgia (52 millones), Firefly Lane (49 millones) y la tercera temporada de Cobra Kai (45 millones). En cuanto a películas, llama la atención descubrir que la apuesta española Bajocero está entre los grandes éxitos con 47 millones, mientras la serie mexicana Quién mató a Sara sumó 55 millones, siendo el título más popular de habla no inglesa en EEUU.