Agencias, Ciudad de México.- Todas las mañanas, al levantarse, Juanita Mengel saca el forro de silicona de su pierna ortopédica de debajo de una manta caliente para que las partes metálicas de la prótesis no estén tan frías sobre su piel cuando las une.
Esta residente de 67 años de Amanda, Ohio, hace lo mismo con Lola-Pearl, su gata de 5 años a la que le falta la pata trasera izquierda.
El dúo es uno de los 200 equipos de gatos de terapia registrados en Estados Unidos a través de Pet Partners. Esta organización sin fines de lucro forma equipos de voluntarios con sus mascotas para que realicen intervenciones asistidas por animales, visitando hospitales, residencias de ancianos o colegios para ayudar en terapias y otras actividades que mejoren el bienestar de las comunidades.
“Un animal de terapia es un animal que ha sido evaluado en función de su capacidad para conocer gente nueva y no sólo tolerar la interacción, sino disfrutarla activamente”, explica Taylor Chastain Griffin, directora nacional de promoción de intervenciones asistidas con animales de la organización.
“Un animal de terapia es un animal que ha sido evaluado en función de su capacidad para conocer gente nueva y no sólo tolerar la interacción, sino disfrutarla activamente”, explica Taylor Chastain Griffin, directora nacional de promoción de intervenciones asistidas con animales de la organización.