Agencias, Ciudad de México.- Lionel Messi lloró desconsoladamente al dejar el campo de juego durante la final de la Copa América por primera vez en su carrera. Más allá del fuerte dolor en el tobillo derecho, las lágrimas del capitán de Argentina eran síntoma de una angustia más profunda.
En una de sus “últimas batallas”, como definió al certamen continental, el astro de 37 años no superó la prueba física y hoy parece difícil que pueda disputar su sexto Mundial en 2026.
“Estoy bien, gracias a Dios, y ojalá pueda estar pronto en la cancha de nuevo, disfrutando de lo que más me gusta hacer”, expresó el astro en redes sociales un día después de consagrarse bicampeón de América. No dio más detalles sobre la lesión en el tobillo derecho que no le permitió completar el partido decisivo.
Argentina venció 1-0 a Colombia en tiempo suplementario sin su máxima estrella, con una prueba de carácter colectivo que augura una transición generacional menos traumática de lo que se imaginaba, incluso si involucra al mejor futbolista argentino de la historia.
La Albiceleste hilvanó el cuarto título consecutivo bajo la gestión de Lionel Scaloni — Copa América 2021, Finalissima 2022, Mundial 2022 — y se convirtió en el máximo ganador del certamen continental con 16 trofeos.
“No sé si marcamos una era, pero el equipo no deja de sorprender. Se repone ante las dificultades”, analizó Scaloni. “Cuando sale (Messi), el equipo se multiplica con el que entra y jugamos a lo mejor de otra manera”.
La Copa América fue el primer gran torneo de Messi tras dejar el competitivo fútbol europeo para mudarse a la menos exigente MLS de Estados Unidos.
En su nueva etapa, el físico empezó a cobrarse facturas por la exigencia a la que fue sometido a lo largo de su carrera. Durante el último año, las molestias musculares lo obligaron a ausentarse varios partidos, tanto en su club Inter Miami como de la Albiceleste.
En el segundo compromiso del torneo continental ante Chile, Messi sintió dolor en el aductor de la pierna derecha y luego no jugó ante Perú en el cierre de la primera ronda. Reapareció en los cuartos de final contra Ecuador, pero sin influir en el juego y falló su ejecución en la tanda de penales.
Su mejor partido en el torneo fue la semifinal ante Canadá, en la que anotó un gol, el único en esta edición.
En la final, Messi se dobló el tobillo derecho en una jugada en la que disputó el balón con el zaguero colombiano Santiago Arias en la primera etapa. Si bien salió a jugar el complemento, fue reemplazado por Nicolás González a los 64 minutos.
Con el tobillo visiblemente inflamado, el capitán fue moderado en la celebración junto a sus compañeros.
Hasta el momento no hubo un parte médico oficial sobre la lesión.
A diferencia de las últimas consagraciones, Messi no tuvo contacto con los periodistas. Recién un día después de levantar el trofeo, eligió expresarse por redes sociales.
“Estoy feliz, mucho, sobre todo porque logramos el objetivo que teníamos”.
El próximo compromiso de Argentina será en septiembre por las eliminatorias sudamericanas para el Mundial 2026, que lidera con 15 puntos. Primero recibe a Chile y luego visitará a Colombia.
Está por verse si hay una segunda edición de la Copa Finalissima contra España, el nuevo monarca de Europa.
“Esta selección tiene mucho presente y mucho futuro también. ¡Vamos Argentina carajo!”, cerró el capitán su mensaje, sin dilucidar si él seguirá o no siendo parte.