Agencias/ Ciudad de México.- El Gobierno vasco no va a rebajar las condiciones que impuso para que haya público en San Mamés durante la Eurocopa de junio, según ha anunciado el lehendakari, Iñigo Urkullu.

En una entrevista en Radio Euskadi, ha explicado que la celebración de la Eurocopa en San Mamés era su deseo, pero seguirá los consejos de las autoridades sanitarias y «no se rebajarán los criterios marcados» por el propio Gobierno vasco para permitir público.

Entre estos criterios están la exigencia de tener un 60% de la población vacunada en el País Vasco y resto de España antes del 14 de junio, o una cifra que no supere el 2% de las camas de las UCIS ocupadas por COVID para la fecha de los partidos, unos objetivos que la Federación Española de Fútbol considera «imposibles de cumplir y desembocarán, por tanto, en la ausencia de público».

En esta situación, la UEFA decidirá el próximo lunes 19 de abril si mantiene la sede de Bilbao, al igual que otras tres ciudades a las que ha pedido más información.

El lehendakari ha opinado que la polémica sobre la presencia de público o no en el campo es «interesada políticamente».

Respecto a la final de Copa frente al Barcelona, Urkullu ha apelado a la responsabilidad individual para evitar que se repitan «el incivismo, insolidaridad y la irresponsabilidad» que se vivieron en las aglomeraciones en Bilbao, Lezama y Zubieta en la anterior final frente a la Real Sociedad.

El alcalde de Múnich advirtió el lunes que aún podría prohibir el ingreso de aficionados a los encuentros de la Euro 2020 en esa ciudad alemana, en momentos en que la UEFA busca asegurar que haya por lo menos algo de público en las gradas.

La semana pasada, la UEFA otorgó a cuatro de las 12 ciudades sede —Múnich, Roma, Bilbao y Dublín— una extensión hasta el 19 de abril para garantizar el ingreso de público. De otra forma podría retirarles la sede. Las otras ocho ciudades ya dieron la garantías.

“Desde la perspectiva actual, desafortunadamente no podemos descartar que se prohíba que haya espectadores para la fecha programada de partidos en junio, sobre la base del índice de infecciones y los correspondientes requisitos de protección en Baviera”, dijo el alcalde Dieter Reiter en un comunicado.

Reiter se reunió con el presidente de la Federación Alemana de Fútbol Rainer Koch a fin de discutir los posibles escenarios para permitir que haya público. Indicó que preferiría tener aficionados en los encuentros con “medidas adicionales de higiene y estrategias de pruebas” para permitir que se utilice un porcentaje de la capacidad en el Allianz Arena del Bayern Múnich.

Múnich tiene programado para recibir tres duelos de la fase de grupos y uno de cuartos de final.

La presión que puso la UEFA sobre Múnich para permitir el ingreso de aficionados llega en un momento en el que la ciudad se prepara para endurecer las restricciones de contacto social a partir del miércoles, con el objetivo de detener la tasa de infección.

Habrá un toque de queda en la noche y algunas tiendas que pudieron reabrir de manera parcial al inicio del año tendrán que cerrar de nuevo.

El presidente del grupo municipal del PP en el Ayuntamiento de Barcelona, Josep Bou, ha propuesto que Barcelona ocupe el sitio de Bilbao si finalmente la capital vizcaína no puede ser la sede de la Eurocopa de fútbol de este verano.

Según ha explicado el partido en un comunicado, Josep Bou ha señalado que la capital catalana sería «una magnífica sede para albergar a la Selección española» en la primera fase de la máxima competición del fútbol europeo de selecciones.

Bou ha defendido que sería un «signo de normalidad» que la Selección Española pudiera jugar sin problemas en Barcelona: “Una ciudad que ha dado tanto al deporte y al fútbol se merece poder ver jugar a la Selección sin que nadie se sienta herido en sus sentimientos”.

El presidente del grupo municipal popular en Barcelona ha pedido que la Ciudad Condal haga un esfuerzo para albergar la competición también como un evento más para reactivar económicamente la ciudad y proyectar Barcelona al mundo.

“Sería una manera de poner la marca Barcelona como ciudad de primer nivel en el aspecto deportivo y empezar a alejar la ciudad de la mala imagen que lleva dando a nivel internacional por las políticas de Colau”, ha dicho Bou.

La UEFA deberá decidir el próximo 19 de abril si Bilbao se mantiene como sede española de la Eurocopa, y ya hay candidatos para cubrir su baja: Sevilla y Madrid se han ofrecido para ser sede.